Es imposible poner un tiempo estándar de duración, cada persona es un universo y la historia de vida va a condicionar los ritmos del proceso.

En determinados momentos perinatales, el proceso se ve marcado por los propios ritmos del momento vital de la persona, moviendo más o menos en función de lo necesario que sea. A veces iremos rápido, a veces tendremos que dejar algunos temas de nuestra historia en la lista de pendientes, y otras veces la vida nos pondrá en pausa.

En cualquier caso, lo natural será trabajar durante un tiempo suficientemente largo.

No vamos a resolver nada en una sola sesión, no tenemos varitas mágicas.